Acapulco, 9 Ago (Notimex).- Ante la falta de servicios de salud en sus comunidades, el 70 por ciento de la población indígena en Guerrero combina la medicina tradicional o remedios caseros con el medicamento de laboratorio para curar sus enfermedades. En entrevista con Notimex, el representante de Pueblos y Comunidades Indígenas en el estado de Guerrero, Flores Allende Montiel, dijo que enfermedades como diabetes, temperatura, heridas, diarreicos, dolor de estomago y hasta para la desparasitarse los indígenas usan remedios tradicionales. Ejemplificó que en su comunidad de Tlamacan, perteneciente al municipio de Mártir de Cuilapa, de donde él es originario y conformada por más de mil 600 habitantes, se utiliza las limpias para curar del llamado “espanto”, medicina tradicional para curar de coraje y plantas medicinales para aliviar diferentes enfermedades. Dijo que en su comunidad hay un árbol llamado Copachin, donde sus hojas son utilizadas en té para controlar la diabetes; otro árbol de nombre Tminaxiktzin para curar las heridas. Detalló que para curar las heridas, la hoja que se corta de ese árbol se utiliza el liquido que sale como pegamento para cerrar la herida y se evita una hemorragia. “Entonces estamos combinando la medicina tradicional con la farmacéutica para curar a los indígenas”. Otra de las plantas medicinales que utilizan los indígenas es el Epazote para expulsar amibas y lombrices, y la yerbabuena se recomienda para calmar problemas como cólicos o mal aliento, ambos elaborados como té caliente, a sí como la corteza del árbol Tlacuanpetzin, para las personas que tiene temperatura. “La corteza del árbol Tlacuanpetzin se muele en un molino y ya la persona que está enferma de toma el polvo con un poco de agua, se mezcla y se lo toma para calmar la temperatura”, detalló. Flores Allende, también informó que para utilizar las plantas medicinales se tiene que acudir con una persona que en el pueblo indígena conozca como tomarse, porque advirtió que aquel que lo haga sin conocimiento de cómo tomarse y se pasa de dosis corre el riesgo morir o quedar en coma. “En mi pueblo tenemos un curandero que es para las limpias, otro curandero para aliviar enfermedades con remedios tradicionales y hay otro curandero y que es exclusivo para aliviar el coraje, tiene que haber cada persona en su ámbito para utilizar las plantas medicinales”. Comentó que debido a que en las comunidades indígenas no hay centros de salud y los que están no tienen médicos, enfermeras ni medicamentos, el 70 por ciento de la población indígena utiliza las plantas medicinales. Allende Montiel informó que en su comunidad de Tlamacan, donde se habla la lengua Nahualt, hay una casa de salud pero no tienen médico desde hace un año, y a la enfermera que acude se le tiene que pagar 50 pesos. En su comunidad, explicó, hay una persona que cura a los adultos y niños de problemas de “coraje”, y a las personas mayores les prepara remedios a base de mezcal, ajo y humo. En las comunidades indígenas de Guerrero, las enfermedades de cáncer y diabetes son las que más padecen los indígenas, y la edad promedio que viven es hasta los 70 años. “En la actualidad, la edad máxima para vivir es de los 70 a 75 años, ya muchos no viven más de los 80 años… no contamos con los servicios de salud y las autoridades no envían médico ni medicinas, en algunas comunidades no hay centros o casa de salud y es por eso que la población acude a yerbas medicinales o curanderos”, precisó. Flores Allende dijo que en sus comunidades indígenas se ha agudizado la discriminación, antes eran los mestizos quienes los discriminaban y ahora en la actualidad son entre los mismos indígenas quienes pisotean los derechos. Comentó que hay indígenas que llegan a cargos de elección popular y se olvidan de los ciudadanos quienes lo apoyaron y no comparten los recursos y proyectos que salen del municipio, estado o federación. Por parte de las autoridades gubernamentales, también se han presentado discriminación y han sido discriminados en programas de salud y pobreza. NTX/ACS/HAR