Algunos famosos han heredado (o impuesto) a sus hijos el gusto por lucir a la moda. Con costosos outfits, muchos de ellos confeccionados como piezas únicas, estos pequeños marcan tendencia, son fashionistas.
Ropa, zapatos y accesorios de grandes diseñadores mantienen sus clósets repletos de los más in.
North West, primogénita de Kim Kardashian y Kanye West, es la única persona capaz de opacar a sus padres. Tiene solo 3 años y ya usa los chokers mejor que su madre. Harper Beckham es una gran representante del mundo de los fashionistas, su madre, Victoria Beckham confiesa que “Harper es increíblemente chic. Es una cosita pequeña con mucho estilo, con su propia idea de cómo quiere vestir. Ella tiende a escoger lo que quiere llevar exactamente”. Blue Ivy, la hija de Beyoncé y Jay-Z (un dúo siempre ganador), se une al listado; Roberto Cavalli y Tom Ford se han peleado por vestirla. No podemos olvidarnos de Suri Cruise, hija de Katie Holmes y Tom Cruise, quien el 18 de Abril cumple 11 años, una de las niñas que más portadas se han ganado desde que era apenas una bebé. Y, por supuesto, Anja Ambrosio, hija de la top model Alessandra Ambrosio y Jamie Mazur, aún no cumple 9 años y ya es una de las favoritas de los diseñadores perfilándose al mundo del modelaje, quizá, hasta convertirse en un ángel de Victoria’s Secret (igual que su madre).
Muchas otras celebridades han llevado a sus hijos a convertirse en figuras fashionistas con singular naturalidad. Los gemelos de Ricky Martin, Matteo y Valentino, también los pequeños de Miguel Bosé y las pequeñas de Sarah Jessica Parker son ya verdaderos íconos de la moda, por cierto, en los tres casos, pequeños que llegaron a la vida de sus padres a través de un vientre de alquiler.
Pero qué tanto es deseo de los niños vestirse a la moda y qué tanto es sencillamente una imposición del mundo en que inevitablemente están creciendo.