Numerosos estudios han revelado que aquellos niños que realizan alguna actividad física son menos propensos a desarrollar síntomas de depresión, el más reciente realizado fue el de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU) esto en el marco del Día Internacional de la Felicidad.
El ejercicio, que va de moderado a intenso, permite a los niños distraerse y evitar recuerdos de experiencias negativas, el deporte es una disciplina que les brinda la oportunidad para mejorar su autoestima.
Este estudio, que fue publicado en Pediatrics, asegura que los niños físicamente activos tienen un mayor desarrollo emocional, así como una mejor integración social a diferencia de los infantes que no hacen ejercicio.
Cerca de 4 años que se han estado llevando a cabo estas investigaciones, donde se han centrado en niños de seis años de edad y se descubrió este resultado en el que los niños entre 6 y 8 años de edad son menos propensos a presentar síntomas de depresión.
Los noruegos especialistas en el tema, argumentan que aproximadamente 5% de los niños y adolescentes a nivel mundial padece depresión y debemos prestar más atención en aquellos que presentan problemas de aprendizaje, conducta, ansiedad o atención ya que son los más propensos a padecerla.
También debemos observar a aquellos infantes que enfrentan situaciones constantes de estrés, a quienes han sufrido de alguna pérdida o los que tienen antecedentes de esa enfermedad ya que también podrían padecer de depresión.
Para detectar la depresión en los niños es importante que observen muy bien sus reacciones, si por ejemplo llora frecuentemente, está enojado, es hostil, muestra falta de interés en actividades que antes disfrutaba, si pierde el apetito, no se comunica o expresa lo que siente y si lo ves que comienza con aislamiento social.
Busca alguna actividad física que le pueda atraer así podrá desarrollar sus habilidades y sobre todo elevar su autoestima cuando descubra que es capaz de conseguir lo que se proponga.