La dieta pescetariana toma de la naturaleza sus principales ingredientes, es decir, combina alimentos que provienen del mar y ríos con gran variedad de vegetales; de hecho, esto es lo que anima a muchos a elegir un estilo de alimentación pescetariano antes de entrar de lleno al vegetarianismo.
En este sentido, conviene señalar que la diferencia entre vegetarianos y pescetarianos, según expertos, es que estos últimos comen pescados y mariscos, mientras que los vegetarianos evitan por completo productos animales motivados por la conservación del ambiente y el respeto a los derechos de los animales.
El menú se acompaña con verduras, y cereales, se pueden comer frutas frescas y secas. Al igual que un vegetariano, están permitidos los lácteos, pero se excluyen carnes rojas y de aves.
Se pueden preparar una gran variedad de bocadillos, como albóndigas de pescado, bastoncitos de merluza, filet de pejerrey frito como milanesa, acompañado con papas fritas y huevos. Pero hay otras opciones en donde los pescados se cocinan en el horno y son mucho más sanos.
Dentro de la dieta pescetariana, esta la cazuela de mariscos, la paella, las copas con camarones acompañadas con aguacate palmitos y salsa golf. Se comen langostinos con crema o mayonesa, ostras, mejillones a la provenzal con arroz o fideos, budín de arroz con atún, mayonesa de pescado, arenque a la crema, almejas en escabeche, pulpo a la gallega, omelet de langostinos, centolla con salsa golf, etc.
Como se verá la variedad de una dieta pescetariana es muy amplia y agregándole verduras como guarnición y algunas frutas para presentar algún plato tropical, la creatividad gastronómica va en aumento. Se dice que la dieta pescetariana es el punto medio entre una dieta carnívora y una vegetariana.