Durante las noches, mientras dormimos pasamos cerca de ocho horas en promedio con la boca cerrada ahí se acumulan restos de alimentos, lo que origina un mal aliento y los ácidos que se provocan penetran en el esmalte de los dientes dañando y generando problemas de caries.
Por eso es importante que te acostumbres tú y toda la familia a lavarse los dientes tres veces al día, evitarán complicaciones si los hábitos de salud bucal están establecidos y lo hacen correctamente.
Los dientes son muy importantes y por eso debes cuidarlos, te ayudan a masticar bien los alimentos, te permiten hablar con claridad y obviamente a tener un buen aspecto.
Al lavártelos, como lo aconsejan los odontólogos, evitarás la formación de placa dental, que es una capa muy fina que actúa como un imán para las bacterias y el azúcar.
Ahora bien, no solo se trata de los dientes sino de toda la boca, en la lengua también se acumulan microbios por lo que es importante hacer un barrido sobre ella con el cepillo. Con un cepillado de adentro hacia afuera con enjuagues bucales intermedios es la forma de hacerlo más recomendable.
Para una mejor técnica para lavarlos los especialistas recomiendan dividir la boca en cuadrantes y hacer el cepillado conforme a las manecillas del reloj. Iniciando en los molares de manera circular y de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba en los dientes frontales y laterales no olvidando las caras internas de los dientes.
Es importante que el cepillo que utilizas se enjuague correctamente y lo cambien cada dos meses o cuando las cerdas se abran mucho. No olvides también utilizar hilo o seda dental, ésta debes deslizarla entre cada par de dientes adyacentes y a lo largo de la línea de las encías, te ayudará eliminar los restos de comida que se ocultan en donde tu cepillo no puede llegar.
Cuida la salud bucal tuya y de tu familia, con dientes sanos, habrá sonrisas permanentes.