Si te gustan los hombres pero también las mujeres, aunque nunca has tenido una relación seria homosexual con otra mujer, entonces puede que seas una mujer bicuriosa. La apertura sexual de los años 60 y 70 fue la que abrió el camino a sentir todo tipo de sexualidad en tu cuerpo, en tu forma de ser y en tu manera de reconocer una pareja posible. Gracias a esta generación, la nueva ola de personas en busca de una sexualidad más abierta la tiene mucho menos compleja que en el pasado, ya que antes todo podía llegar a ser tabú.
Una mujer bicuriosa, también llamada heteroflexible u homoflexible, es aquella que se identifica y reconoce como heterosexual u homosexual, pero no descarta la posibilidad de sostener relaciones con alguien de su mismo sexo o del opuesto, según sea el caso. Si tienes fantasías con los dos sexos sin complicaciones, sin remordimientos y sin culpa, entonces eres una bicuriosa libre de hacer o pensar lo que quieras con respecto a tu sexualidad.
Hay quien asegura que la heteroflexibilidad no existe y que quien se define como una persona homosexual con miedo a salir del closet de una vez por todas, o también con una persona bisexual que no tiene el valor para definirse como tal, pero también puede ser una persona que simplemente no se define por ninguno de los dos, por ende, es mucho más libre de explorar y decidir.