Después de la terrible tragedia ocurrida en Monterrey, Nuevo León, donde un alumno entró a una escuela para dispararle a sus compañeros, los padres y madres de familia están en alerta roja debido a la violencia que puede estar dentro de sus hijos o amenazándolos entre sus compañeros. La energía violenta puede ser compleja de detectar en un ambiente donde hay muchas personas.
Como madre de familia debes encontrar comportamientos antisociales en tus hijos, o en los amigos de tus hijos, intentar hablar con ellos, cuáles son las razones de ese tipo de comportamiento, si en verdad existe un malestar profundo en su personalidad o si simplemente está siendo un adolescente inconforme con todo, una actitud cotidiana. Si encuentras algún indicio de violencia, aunque sea el más pequeño, erradicarlo no en forma de regaño sino de entendimiento. Los adolescentes buscan llevar la contraria a sus padres, entre más prohibas un hecho, el adolescente más querrá saber de qué se trata.
Expertos aconsejan tener comunicación constante con tus hijos, sin preguntas directas sobre sus sentimientos, sino una conversación tranquila y normal, donde descubras sus gustos, su forma de ver la vida y sus valores. No se aconseja invadir su privacidad, pero si sientes o viste el primer indicio de depresión o violencia, puedes revisar sus redes sociales bajo otros nombres, saber qué realmente piensa y hace. Los adolescentes con problemas son transparentes en cuanto a redes sociales, en general todas las personas sienten una libertad de expresar lo que realmente sienten en Facebook o Twitter.
Observa quiénes son sus amigos, si llegas a divisar algún comportamiento extraño, poco normal, acude a los expertos, maestros, padres de familia. No se recomienda el ataque de las normas de conductas ordinarias, sino la contratación de expertos que puedan comunicarse mejor con la persona en cuestión.
Puedes acudir a fundaciones como Fundación en Movimiento, quienes se especializan en casos contra el bullying y la violencia en las escuelas.