Existen algunos consejos que te ayudarán a inculcarle confianza a tu hijo. Lograrlo lo hará una persona más segura de sí mismo, que se quiera más, con una autoestima a prueba de todo.
Mantén un hogar positivo. Sí, habrán tiempos malos y los niños quizás verán eso, pero todas tus preocupaciones se traspasan a ellos de manera directa. Por eso es importante que puedas alentarte a ver el lado positivo, y transmitirle eso a ellos.
Enséñalo a no temer a sus errores. Es vital dejar en claro que todo el mundo se equivoca, aún si tenemos que aspirar a mejorar. A veces habrán mejores épocas que otras, y decírselo puede alivianar sus cargas.
Destaca sus características positivas. No es la idea criar a un niño soberbio, pero no hay nada de malo en destacar sus cualidades.
Celebra sus logros. No es necesario que por cada buena nota o acción vayan a cenar con bombos y platillos, pero sí recuerda felicitarlo y que sepa que hay apoyo tras de él.
Exprésale tu amor siempre. Puede que esto esté de más, pero en muchas ocasiones olvidamos repetir a nuestros hijos que los amamos.
Ayúdalo a reconoer sus sentimientos. La regla es que está permitido sentir de todo, el punto es cómo lidiamos con ello. Pero que todas sus emociones son válidas, y no debe avergonzarse de ellas.
Sé su ejemplo. No les pidas algo que tú no haces ni demuestras. Sé la persona que ellos quieren que sigas, al ver tu consecuencia y buen ejemplo, querrán seguir esto y sabrán qué es lo que hay que hacer.
Háblale con la verdad. Los niños creen e imaginan muchas cosas. Cuando hacen afirmaciones irreales o desalentadoras, lo bueno es siempre ir con la verdad. Pero son niños, por lo que debe ser dicho de manera dulce y optimista.
Házlo parte de tus tareas. Cuando das responsabilidades, por más pequeñas que sean, estás demostrándoles confianza.
Jamás lo compares. Ni con otros niños, ni contigo mismo, ni con sus hermanos. Esto puede dañar su autoestima de manera permanente, y llevar a inseguridad o a competitividad.