Cada año se contagian de pediculosis en México aproximadamente seis millones de personas, principalmente menores de 12 años, siendo no sólo la escuela, sino también los sitios que se visitan en temporada de vacaciones, los lugares propicios para que los piojos se muden de una cabeza a otra.
Los piojos son animales milimétricos que se alimentan de la sangre de los humanos, por lo cual al picar y succionar causan lesiones al cuero cabelludo, situación que se complica porque debido a la comezón intensa que esto causa, el huésped de dichos parásitos se rascan la cabeza haciendo más grande la lesión.
En esta temporada de vacaciones de verano, la especialista Ingrid Sánchez-Armas recomienda evitar compartir artículos de higiene y arreglo personal como peines, cepillos, broches, diademas, gorras y toallas, porque en muchas ocasiones ahí se encuentran las liendres ( huevecillos) de los piojos.
Explicó que una manera sencilla de proteger a las niñas y los niños para evitar contagiarse de piojos, porque 80 por ciento de los infectados con menores de 12 años, es peinarlos con gel, y en el caso de las mujeres lo mejor es que lleven siempre el cabello recogido en una trenza o un chongo.