El estrés es una alerta del organismo a situaciones que de desafío, presión o trauma, cuando esta respuesta se prolonga por un a gran cantidad de tiempo y la situación se complica se denomina estrés crónico y puede tener graves consecuencias para la salud.
El estrés puede tener múltiples causas, pero lo importante es controlarlo, de lo contrario puede causar una ansiedad patológica que ocasiona trastornos en el organismo.
Practicar ejercicio regularmente, dedicar tiempo para salir con amigos, cuidar y mejorar la alimentación, hidratarse y tener momentos para la relajación, reducen de manera importante el estrés crónico.
La experta del IMSS en Jalisco aseguró que un estrés acumulado durante varios años aumenta las probabilidades de morir a causa de un evento vascular como el infarto agudo al miocardio, conforme se tiene más edad, motivo por el cual es necesario mejorar el estilo de vida en casa y acudir en busca de apoyo especializado.
En este sentido, recomendó implementar cinco medidas básicas para reducir los niveles de estrés a los que se someten las personas.
Detalló que la primera es identificar el elemento o la situación que causa efectos nocivos tanto física, como mental, ya que hay que aceptar que estamos estresados por un matrimonio, un divorcio, la pérdida de un empleo, de un ser querido.
La segunda es incorporar el hábito del ejercicio todos los días de manera constante, al menos durante 30 minutos sin parar, a un ritmo adecuado para cada persona.
Otra medida benéfica para quienes padecen estrés crónico es cuidar de una mascota y ampliar el círculo social: “hacerse cargo de algún animal nos permite sentirnos acompañados. Un alto porcentaje de personas con el problema de salud ya mencionado viven solas y tienden a refugiarse en algún vicio”.
La cuarta medida es llevar una dieta saludable para mejorar el estado general de salud y reducir somatizaciones del estrés (migraña, colitis, gastritis).
Añadió que si la persona tiene sobrepeso u obesidad, disminuir las grasas, los azúcares y los productos altamente industrializados, y aumentar la ingesta de agua simple en lugar de aguas frescas, jugos o refrescos.
Finalmente, recomendó buscar apoyo médico en las unidades de Medicina Familiar (UMF) para tratar síntomas asociados al estrés, como la depresión y la ansiedad.