Los atracones de comida forman parte de los trastornos de la conducta alimentaria y afectan comúnmente a personas entre 20 y 40 años de edad, aunque también suele presentarse en la población más joven por factores sociales como la moda, el bullying y las relaciones interpersonales.
Aunque no lo creas, los atracones, perjudican al 1.9% de la población mundial y hoy por hoy son más frecuentes que otros trastornos como la bulimia y la anorexia. Se estima que en México 1.5 millones de jóvenes están propensos a sufrir atracones y es preocupante porque unas 300 mil personas ya lo padecen. Este padecimiento era o es conocido también como comedor compulsivo, daña a hombres y mujeres, pero especialmente a ellas.
Este trastorno se trata de una enfermedad mental relacionada con las emociones y requiere atención integral, con la participación de áreas como nutrición, psicología y psiquiatría, entre otras. Un atracón es la ingesta excesiva de alimentos por una persona en muy poco tiempo.
“Se relaciona principalmente con emociones encontradas, con malestar emocional, del tipo frustración, tristeza, ansiedad. Los pacientes nos describen su cuadro como un comer bajo estos estados emocionales no favorables para ellos”, indicó el especialista Alejandro de Jesús Caballero Romo. De acuerdo con el especialista, este trastorno implica alteraciones neurobioquímicas a nivel cerebral y los detonantes ambientales; a la vez que aclaró que el atracón no es voluntario, no es sinónimo de obesidad y tampoco es un fracaso.
Un atracón normalmente va precedido por un ayuno prolongado, ante lo cual recomendó no saltarse el desayuno ni dejar de comer por tiempos largos.