Luego de la gran polémica que se desató en el estado de Morelos sobre la entrega de los víveres, los alcaldes del estado han garantizado que la distribución de víveres para las familias damnificadas por el sismo se realiza sin condicionamientos y llamaron a la población a permitir que la ayuda fluya y se sume a las labores de descarga, clasificación, empaquetado y distribución.
Raúl Tadeo Nava, presidente municipal de Cuautla, agradeció la solidaridad de los mexicanos con los morelenses y explicó que la ayuda que se requiere es diversa, pues no sólo implica hacer llegar los víveres a las familias damnificadas, sino también facilitar cocinas, baños y regaderas portátiles.
También informó que la gente afectada no tiene dónde cocinar, por lo que el sistema DIF municipal distribuye las despensas pero también las lleva a los comedores comunitarios para que se puedan preparar alimentos calientes para la gente que lo requiere.
Por su parte, Juan Felipe Domínguez Robles, alcalde de Jantetelco, dijo en que si bien existe ayuda que la gente hace llegar directamente a las zonas con afectaciones, otra forma de apoyar a las familias damnificadas es por medio de las instituciones federal, estatal o municipal.
“Hay gente que llega (a Jantetelco) directamente a las comunidades a entregar ayuda o que nos preguntan dónde lo pueden hacer y nosotros les damos los lugares de donde se requieren los apoyos, pero también se necesita que nos ayuden a descargar y empacar.”
“Que se acerquen y que puedan cerciorarse cómo se reparte y que no se esconde la ayuda”, expresó.
Por último el presidente municipal de Miacatlán, Francisco León y Vélez, agradeció el apoyo de los morelenses y otras entidades, y aseguró que “los víveres van a fluir en todo el estado”.