Un adolescente de Carolina del Sur en Estados Unidos fallecido el pasado mes de abril tras desplomarse en medio de la calle pues, según un médico forense tomó “varias bebidas altamente cafeinadas demasiado rápido“.
El joven respondía al nombre de Davis Allen Cripe y contaba con 16 años de edad, el cual falleció tras desvanecerse cercano a las del instituto Spring Hill High School, ubicado en las cercanías de Columbia.
Gary Watts, forense del condado de Richland, dio el informe de que Cripe bebió un café latte, un refresco conocido como Montain Dew, el cual contiene una gran cantidad de cafeína y una bebida energética también con mucha cafeína en menos de dos horas.
Watts declaró que el fallecimiento llegó gracias a un “paro cardiaco inducido por la cafeína, que causó una probable arritmia“. “Es probable que la cafeína no hubiera sido vista como un factor de su muerte si no hubiera sido por los testigos, que dijeron a los forenses lo que Cripe bebió antes de derrumbarse en clase“, ha subrayado Watts, que ha añadido que el principal testigo de los hechos no pudo precisar de qué marca era la bebida energética que tomó en tercer lugar pero “era un refresco de tamaño grande“.
Davis pudo haber consumido unos 470 miligramos en menos de dos horas, de acuerdo con las estadísticas de la web caffeineinformer.com.
De acuerdo con caffeineinformer.com, un latte tiene 142 miligramos de cafeína, un Mountain Dew de 570 ml tiene 90 y una bebida energética de 450ml puede tener hasta 240.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) ha advertido contra el consumo de bebidas energéticas entre niños y adolescentes debido a que sus ingredientes no han sido probados en menores y “nadie puede asegurar que sean seguros“, indica la BBC.
Según la AAP, se han observado efectos secundarios como latidos irregulares y cambios en la presión arterial. La academia denuncia que la mayoría de las bebidas energéticas contienen una cafeína equivalente a tres tazas de café y hasta 14 cucharaditas de azúcar.