El complejo de Dafne toma su nombre de una historia de la mitología griega, en la que la ninfa Dafne es maldecida por Eros y sufre de desinterés hacia Apolo que le juraba amor eterno. Este complejo también es llamando angustia de la penetración ya que se trata del miedo excesivo que muchas mujeres tienen de ser penetradas.
Las mujeres que sufren del complejo de Dafne no pueden explicar qué es lo que sienten y es cuando su cuerpo reacciona de manera equivocada y evaden cualquier actividad que se relacione con el acto sexual.
El complejo de Dafne se manifiesta a través de espasmos involuntarios de lo músculos que rodean la entrada de la vagina, haciendo que la penetración sea imposible o muy dolorosa. Esta situación genera ansiedad y tensión.
Entre las posibles causas de este problema se encuentran la falta de educación sexual, enseñanzas religiosas muy estrictas, abuso o violación, creencias equivocadas sobre la sexualidad, crecer con padres demasiado estrictos y represión.
Si tu pareja tiene este trastorno, lo mejor que puedes hacer es evitar presionarla y buscar la ayuda de un profesional.