El asma es una de las principales enfermedades respiratorias. Esta hace que las vías respiratorias se estrechen e hinchen, provocando dificultad para respirar, tos, presión en el pecho y sibilancias. La palabra asma proviene del vocablo griego asthma que significa jadeo.
Esta condición médica en la mayoría de los casos es provocada por alergia hacia alguna sustancia, como el polvo o la humedad. Esta reacción alérgica es más común en los niños que en los adultos. Estos últimos tienden a desarrollarla debido a infecciones respiratorias o problemas emocionales.
Los síntomas del asma son diferentes en cada persona, así como la frecuencia con la que aparece. Algunas veces los ataques pueden ser diarios y en algunos casos pueden ocurrir con años de diferencia.
Generalmente, los ataques de asma ocurren durante las noches, aunque también ocurren durante el día. En un ataque la persona presenta tos seca, una sensación de ahogo, falta de oxígeno y sonidos sibilantes mientras se trata de respirar. En algunos casos los ataques son tan fuertes que las personas deben ser hospitalizadas.
El tratamiento más común para el asma es la inhalación de sustancias broncodilatadoras, que estabilizan la respiración en un instante. Cuando los ataques son severos y el cuerpo no reacciona con los broncodilatadores se hace usado de corticosteroides. Además de estas sustancias los médicos recomiendan evitar el contacto con las causas de la alergia.
¿Conoces algún otro tratamiento para el asma? ¡Cuéntanos!