¿Cómo guardar tus rastrillos y cuándo cambiarlos?
Esta es la manera más recomendada para cuidar tu equipo de afeitado.
¿Cómo guardar tus rastrillos y cuándo cambiarlos?, irritación, enrojecimiento y un montón de problemas pueden llegar por no tener el cuidado adecuad con el equipo que utilizas para rasurarte. Fellipe Cardoso de Otis & Finn, en Nueva York, te da algunos consejos.
No las guardes en un estuche después de utilizarlas.
Se sugiere que luego de cada uso, enjuagues el rastrillo con un chorro fuerte de agua caliente. Si lo quieres desinfectar, humedece un trapo con alcohol y limpia las navajas. Deja que se sequen durante 12 horas , en posición vertical, en un soporte para rastrillo, lo que permitirá que el aire fluya por el dispositivo.
Cuando se encuentre seco, considera guardarlo fuera del baño, lejos del vapor y de la humedad.
Reemplázalo más seguido.
Aunque algunas compañías dicen que las puedes usar hasta ocho veces, la verdad es que se recomiendo hacerlo sólo la mitad de esas veces. Sobre todo si es que te rasuras habitualmente. Debess tomar en cuenta que cada vez que usas tus rastrillos, estos se deterioran.
Debes tener mucha atención si es que llegas a detectar algo de óxido, pues también se puede llenar de bacterias. Si te cortas con estas navajas y tienen estas condiciones, le estarías dando puerta abierta a las bacterias para entrar.
Usa un rastrillo de seguridad.
Lo primero que debes saber es que los repuestos son baratos. También cuentan con una navaja súper afilada, una que nunca pierde el filo, ya que te deshaces de ella después del primer uso, y corta el vello facial con una sola navaja, en vez de tres o cuatro.
Esto pone menos presión sobre tu piel y provoca menos irritación y menos vellos encarnados.
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