Los buenos muchachos han pasado de moda. Si lo pensamos bien, son en realidad los chicos malos quienes hacen una verdadera diferencia entre una película que fácilmente puede ser olvidada y otra que marque tu vida (por exagerado que suene, los hay).
¿Qué hace que las historias donde se asoma un gran villano pasen al terreno de la inmortalidad? En palabras del dramaturgo y también premio Nobel, Dario Fo, significan un contrapunto necesario para una historia, desde donde se comparte una visión del heroísmo precisamente validándolo desde lo que no es el heroísmo.
Así pues, a continuación el siguiente tributo de la CLS Video a los villanos más inmisericordes de la historia del cine, una pequeña muestra de que la maldad también es una delicia.