La tarde-noche del jueves el ataúd de Joan Sebastian llegó a la Plaza Garibaldi, donde fue recibido con mariachis y aplausos de parte de sus fans.
El cortejo fúnebre tomó por sorpresa a varios de las personas que se encontraban en el lugar, pero no dudaron en ovacionarlo con aplausos y porras cuando se enteraron que se trataba del intérprete de 25 rosas y Tatuajes.
A la salida de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM) el cortejo fúnebre fue escoltado por ocho motopatrullas de protección y vialidad a velocidad moderada saliendo por Eje 8 para incorporarse a Lázaro Cárdenas y de ahí avanzar hacia la Plaza Garibaldi.
José Manuel Figueroa, Julián Figueroa y Maribel Guardia aprovecharon un momento en el que la carroza se detuvo para agradecer las muestra de cariño a toda la gente que se encontraba alrededor.
Después de recorrer distintas avenidas de la Ciudad de México, la carroza con los restos de Joan Sebastian se dirigió a Juliantla, lugar donde descansarán los restos del compositor.