Salma Hayek, que ahora es ciudadana estadounidense, dice que la vida bajo el gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, es como vivir en un “universo paralelo de desinformación”.
La actriz, que apoyó a Hillary Clinton en su carrera por la Casa Blanca, afirmó que Donald John Trump, es “patético” y alguien que crea “sólo violencia y separación”. Todo esto en una entrevista para la revista de moda DuJour, de la que es portada en su número de primavera. “Me parece realmente interesante cómo constantemente acusa a la gente de las cosas que él mismo es” continúa hablando del mandatario.
Salma Hayek, recordada por El callejón de los milagros, Frida y Savages, habló de las acusaciones que hizo Trump durante su campaña sobre la entonces candidata demócrata, Hillary Clinton, a la que llamó corrupta. “¿Él no es corrupto?” cuestionaba Salma. “Él seguía diciendo que ella era eso, pero estaba mintiendo todo el tiempo. Es aterrador “, afirmó la actriz veracruzana.
Hayek mantiene una firme postura frente al mandatario estadounidense.”Tal vez aprenderemos mucho de lo que está ocurriendo” afirma mientras cierra la entrevista.
Salma Hayek Jiménez, nacida en Coatzacoalcos, Veracruz, el 2 de Septiembre de 1966 es una actriz mexicana, empresaria y productora de fama mundial. Una de las tres actrices latinoamericanas en haber sido nominadas como mejor actriz al premio Oscar. Y la figura mexicana más prominente en Hollywood desde Dolores del Río.
Fue en 1991, cuando Hayek se mudó a Hollywood, que logró notoriedad mientras lidiaba con el racismo y alguno que otro tropezón hasta migratorio. El gran papel de su carrera llega cuando da vida a Frida Kahlo, polémica pintora mexicana de amoríos varios (e internacionales) y traumáticas experiencias.
Mujer de 50 años y 1.57 metros de estatura. De belleza natural, pues para Salma no es atractiva la idea de someterse a inyecciones o rellenos en el rostro. No cree en el botox.
Con escotes de infarto, un marido francés y una hija estadounidense, Salma Hayek no cree en las fronteras, es orgullosamente mexicana y no piensa (ni sabe) quedarse callada.