Durante la noche del pasado 10 de marzo, Iraila fallecía víctima del cáncer que llevaba sufriendo desde hace más de 4 años. Las dudas pasaban por saber si era buena idea seguir emitiendo el programa con la participación de Iraila pese a su trágica desaparición.
Pero así fue: representantes de Telecinco y de la productora de La Voz, Boomerang TV, se reunieron en Valencia con los padres de la niña para su voluntad en lo que respecta a la presencia de la pequeñita de 12 años en el concurso, que fue grabado hace meses, según reveló El Mundo.
La familia decidió permitir que se emitiera pese a lo absurdo de la situación del retraso en el tiempo: Somos partidarios de que el programa se emita, porque es lo que ella hubiera querido, ha dicho la familia.