El musical Mentiras rindió homenaje a la cantante Estela Núñez por sus casi cinco décadas de trayectoria artística en las que ha cantado baladas, música ranchera, con trío y banda, y en cada género ha plasmado su sensibilidad que la ha colocado como una de las grandes intérpretes de la música popular mexicana.
Al final de la función número 1825 de la puesta en escena, producción de Federico González y Morris Gilbert, Estela Núñez apareció en el escenario tras haberse proyectado su semblanza, y cantó Una lágrima, su primer gran éxito grabado en 1969.
La cantante, a pesar de que dijo estar agripada, interpretó magistralmente el tema Vivir sin ti, con el que se coronó como la triunfadora del festival OTI de 1979.
Estela, originaria de Guadalajara, Jalisco pero que desde pequeña radicó en León, Guanajauato, en el género ranchero es recordada gracias a temas como La malagueña, Cielo rojo y El jinete, por citar algunos; asimismo, grabó con la Banda El Recodo El sauce y la palma, y con trío, Ódiame.
Fue la primera baladista que, a finales de los 70, cantó composiciones de Juan Gabriel, tales como Lágrimas y lluvia, No me trates mal y Nuestro amor es lo más bello del mundo, años más tarde, el tema No me arrepiento de nada, también autoría del Divo de Juárez, se ubicó como uno de los grandes éxitos en la radio mexicana.
Sin duda, la década de los 80, la misma en que se sitúa el divertitrágico musical Mentiras, ha sido una de las más importantes en la carrera de Estelita pues colocó los sencillos Con las manos vacías, ¿Te acuerdas?, Por amores como tú, Vamos a darnos todo, Extraño tus ojos y Ruega por mí, por mencionar algunos.