Ghost in the Shell estrena mañana en taquillas internacionales. Una película estadounidense de ciencia ficción dirigida por Rupert Sanders y escrita por Jamie Moss y Ehren Kruger, basada en el manga japonés homónimo de Masamune Shirow.
Ghost in the Shell (La Vigilante del futuro), es un filme sobre Mayor (a quien Scarlett Johansson da vida), una humana salvada de un terrible accidente, quien es cyber-mejorada para ser un soldado perfecto dedicado a detener a los criminales más peligrosos del mundo. Cuando el terrorismo alcanza un nuevo nivel que incluye la habilidad de hackear las mentes de las personas y controlarlas, Mayor está excepcionalmente capacitada para detenerlo. Mientras se prepara para enfrentar a un nuevo enemigo, Mayor descubre que le han mentido: su vida no fue salvada, fue robada. Ahora no se detendrá ante nada para recuperar su pasado, descubrir quién la convirtió en lo que es y detenerlo antes de que haga lo mismo a otras personas inocentes.
Una primera adaptación del anime al cine llegó en 1995. Producida por Production I.G, Bandai Visual, Kodansha y Manga Entertainment, gozó de gran aceptación entre los fans de la historia original. La grabación de la banda sonora del filme se hizo con un estudio de alta tecnología para lograr un sonido superior a lo largo de la película. Se utilizó un espacializador para alterar el sonido, específicamente en las conversaciones cerebrales electrónicas, modificando así las voces de los personajes.
La nueva versión de Ghost in Shell es un aporte indiscutible al desarrollo del ciberpunk, un subgénero de la ciencia ficción, conocido por su enfoque en un futuro con “alta tecnología y bajo nivel de vida”. Por supuesto, tratándose de la adaptación de un anime, Scarlett Johansson fue muy criticada como elección actoral. Muchos consideraban que el rol debía ser para una actriz asiática y, sin embargo, ese es uno de los puntos fuertes del filme, el simple morbo (además de los embutidos trajes que Scarlett mostrará).
Para los críticos de cine (y expertos en anime), que ya vieron la cinta, Ghost in Shell (versión 2017) es mucho ruido y pocas nueces.