Si se preguntan qué puede esperarse de la próxima serie de conciertos de Mariah Carey en el Caesars Palace de Las Vegas, más allá de sus 18 éxitos número uno, su gran entrada es una señal de lo que estaría por venir.
“No importa lo que pase, haremos de esto un momento festivo queridos. Es un gran espectáculo“, dijo Carey el lunes entre bambalinas en The Colosseum.
La cantante fue recibida por admiradores que la clamaban a gritos en la entrada del Caesars Palace, adonde arribó en un convertible rosado clásico de 1936 llevando atrás 18 carteles rodantes con los títulos de sus números uno, incluyendo “Always Be My Baby” de 1996 y “Heartbreaker” de 1999. Hombres vestidos como gladiadores la cargaron hasta el casino en una plataforma digna de Cleopatra.
La entrada marcó su llegada a las Las Vegas, donde se presentará en The Colosseum desde el 6 de mayo hasta julio en el mismo escenario en el que Celine Dion, Cher, Bette Midler y Shania Twain han tenido residencia.
“Atención Las Vegas, una nueva chica ha llegado al pueblo“, dijo Carey a la multitud de fans que la grababan con sus teléfonos inteligentes adentro del casino.
El espectáculo “Mariah #1 to Infinity” tiene 18 presentaciones previstas hasta la fecha y coincidirá con el lanzamiento del nuevo sencillo y video musical de Carey, “Infinity”.