Honda puede estar más tranquilo y es que el fabricante japonés cree que ya tiene la clave de por qué su MGU-H en el motor de McLaren MCL32 no está funcionando como debería en la Fórmula 1.
Y es que en el segundo día del test post carrera de Bahréin, el piloto Stoffel Vandoorne completó las 81 vueltas sin ningún problemas, además, terminó con el cuarto mejor tiempo de aquella sesión, solamente ocho décimas por debajo del Mercedes de Valtteri Bottas.
“Después de los problemas de MGUH durante el Gran Premio de Bahréin, concentramos nuestro esfuerzo en analizar el fallo en un corto período de tiempo antes del test. Basándonos en este análisis, adoptamos contramedidas provisionales en nuestra unidad de potencia y creemos que podemos confirmar la dirección de la solución después de la sesión de hoy”, explicó Satoshi Nakamura, el jefe de la ingenieria de Honda.
“También hemos hecho progresos con los mapas de motor con el fin de proporcionar una mejor conducción y reducir la vibración”, añadió.
De igual forma, Nakamura se siente aliviado, puesto que tras el fracaso que tuvieron en el primer día de test este miércoles pudieron “llevar a cabo nuestro programa de acuerdo al plan original y completar 81 vueltas de trabajo útil”. También se acordó del gran trabajo de todo su equipo, al que agradeció por “trabajar incansablemente día y noche para prepararse para el test”.
Ahora, Honda cree que el camino a retomar una buena imagen en la F1 ya está marcado y Satoshi Nakamura se mostró con confianza en que podrán conseguir más potencia en su actual motor, el cual había sido su mayor problema desde el inicio.
“Aunque todavía estamos detrás de nuestros competidores en términos de rendimiento, estamos seguros de que estamos en la dirección correcta. Creemos que nuestro motor todavía tiene más potencial y vamos a continuar nuestro desarrollo. Tenemos menos de 10 días antes del Gran Premio de Rusia, y esperamos otra dura carrera allí. Sin embargo, seguiremos luchando duro junto con McLaren para seguir avanzando”, concluyó.