Clif Avril, ala cerrada de los Seattle Seahawks ha cumplido una promesa que se veía complicada de cumplir pues antes del inicio de la temporada 2016 de la NFL había mencionado que por cada captura de mariscal de campo que realizara en esta temporada, construiría una casa en Haití, algo que ya ha cumplido.
Avril ha sido uno de los jugadores más consintientes dentro de la defensiva de los Seahawks, contando con 31 años de edad estableció su mejor marca en una temporada respecto a capturas, promediando 11.5, ganándose así su primer viaje al Pro Bowl.
Los padres de Avril viajaron desde Haití a los Estados Unidos en 1989, lo que ha llevado al profesional del fútbol americano a viajar en las dos últimas temporadas bajas para realizar diversas acciones comunitarias. Fue le año pasado cuando hizo la promesa de construir casa por cada captura conseguida.
Acompañado por algunos compañeros de la NFL como Michael Bennet (y su esposa), Marshawn Lynch, Gosder Cherilius, Leger Deuzable y Stephen Tulloch junto a su esposa, viajó a Haití para poder cumplir esa promesa que había hecho tiempo antes.
Visitaron el orfanato que Avril apoya a través de su fundación, a la cual le proporcionó agua limpia todo el año pasado, acción que repetirá este.
Avril y sus acompañantes visitaron las doce casas construidas en la localidad, además de una escuela que el mismo jugador había construido con anterioridad, pero que no pudo asistir a su inauguración por lo cual Marshawn Lynch asistió en su representación junto a la esposa de Avril.
En un país en el que el fútbol americano no es popular, los jugadores de Seattle son conocidos, ya sea por sus actos humanitarios con la comunidad o por lo agradables que se han portado con los mismos, además de inculcar algo del juego en estas mismas comunidades.