Mejores amigos y mejores amigas. Para ellas y ellos con profundo amor, gratitud, felicidad, dicha, complicidad e inmensa admiración: Almudena, Constanza, María Emilia, Alonso y Juan Diego.
Supongo que casi todas las personas tienen al menos una o un mejor amigo. Porque la vida no se entendería sin amigos, sin esas y esos cómplices que nos acompañan, algunos muchos años de la vida, otros en algún tramo y quizá alguno solo una breve temporada, pero eso no significa que no puedan ser tus mejores amigas, amigos o amigues.
Cómplices de vida
Desde muy pequeño descubrí el significado tan valioso, maravilloso e irrepetible de la amistad. Mi hermano AKA mi nene fue mi primer amigo, a la fecha sigue siendo uno de mis mejores amigos. Se jode, porque el resto de su vida seré su mejor amigo, su mayor fan, su cómplice y quien quiere estar a su lado viéndolo brillar, sufrir, gozar, amar y viviendo su vida a plenitud.
Pero muy pequeño conocí a mis cómplices de vida. Mis mejores amigas y amigos y yo nos cruzamos en un patio del colegio, algo que suele suceder, pero, ¿qué posibilidad existía que los seis estuviéramos allí en medio de ese inmenso jardín llorando? Pues sí. Los seis, apenas con seis años de edad, todos sentimos que nuestras madres y/o padres nos habían abandonado. Qué jodida coincidencia.
Y así inició nuestra magnánima relación: llorando. A lo largo de más de veinte años las lágrimas nos acompañado, por supuesto, no seríamos los “chillas” si no incluyera la dosis de dramatismo. Pero también de perdida, de dolor, de enfermedades, de depresión, y obvio; de corazones rotos.
Con el paso de los años nos hicimos más amigos, valga la expresión, porque la vida nos llevó a los seis a escenarios de dolor, de adversidad, de desolación, de fracasos y también de muchas desilusiones, muchas de ellas provocadas fortuitamente, y otras muy bien ganadas.
Mejores amigos
Y así llorando comenzó esta relación repleta de amistad, de malos momentos, de peleas, de distanciamientos, lejanías, sinsabores, malos entendidos pero sobre todo repleta de amor, de contención, compasión, comprensión, compañerismo, secretos compartidos, carcajadas y vivencias únicas e irrepetibles que han marcado nuestras vidas.
Hemos soñado con viajes, conciertos, bodas, fiestas, campeonatos del Real Madrid, obvio los seis somos madridistas. Y, por dicha, todos los hemos cumplido.
Pero llegará la primera boda
Y eso nos tiene a los seis abrumados, pero con amor.
Este año los seis cumpliremos 27 años. Muy jóvenes si me preguntas. Estos mejores amigos jamás pensamos en llegar a esta edad juntos, pero al mismo tiempo nos imaginábamos toda una vida juntos. Pero quizá lo veíamos muy lejano. Y no.
Constanza se casará el primer fin de semana de agosto. La más sensata de los seis pero también las más rebelde, la que podrá reírse de sí misma por horas pero pobre de mí si tengo la osadía de burlarme de ella. Cons es audaz, astuta, brillante, elocuente demás, alegre, respondona, malhablada, muy juiciosa, amorosa pero de las que lleva el amor al límite. Exitosa, hermosa en todos los sentidos: física, mental, espiritual y profesionalmente siempre la belleza está implícita en su vida.
Y, ¿sabes qué? Qué dicha, qué honor e inmensa felicidad ser su amigo. Ser tu mejor amigo. Ser tu mejor amigo, Cons. No imagino un solo segundo de mi vida sin ti, sin tus risas, sin tus sonorísimas carcajadas y sin tus palabras asertivas pero generosas pero amorosas para decirme, justamente con amor, por ejemplo, «vete de ahí, ese no es tu sitio. Vete aunque te dolerá un tiempo». Y sí, como siempre tienes, has tenido y tendrás siempre la razón.
Friends for life!
Mejores amigos para toda la vida. Seguro habrá momentos álgidos, discusiones, gritos y sombrerazos. ¿Pero sabes también qué siempre habrá? Amor, empatía, generosidad, magia, complicidad con una simple mirada o un sonido.
Habrá bodas, seguro también desamores, corazones rotos porque estos seis personajes vaya que lo hemos padecido. Pero también nos enamoraremos, seguro todos volveremos a creer en el amor romántico de pareja. Y seguro seguiremos juntas y juntos. Los seis mejores amigos. Los chillas, las chinas y los chinos.
Los amo. Gracias por estos 21 años juntos. Gracias por ser el sol cuando todo parece nublado. Con amor e inmensa dicha de pertenecer a la vida de cada uno.
Dios nos de salud, vida y dicha. Ah, y fortuna, mucha fortuna.
Con amor, el chillas.