Cinco razones para iniciar a ejercitarte, lo fundamental para que el ejercicio se quede por siempre dentro de tu vida, es encontrar una razón para ello.
Evita el mal “Godín”.
Un estudio que fue presentado por el diario Proceedings, de la Clínica Mayo, ha mencionado que una hora de ejercicio moderado al día puede ayudarte a ir en contra de los males que te provoca el estar sentada de seis a ocho horas del día.
El no hacerlo puede elevar tus niveles de azúcar y presión sanguínea, además de tener riesgo de padecer diabetes y enfermedades cardíacas.
Fortalece tu corazón.
Otro de los estudios demuestra que las personas que entrenaron con mayor intensidad de manera cardiovascular han podido desarrollar un corazón más fuerte a consideración de los que decidieron ser menos intensos.
Evita la diabetes.
Investigaciones recientes han demostrado que el 75% de tu frecuencia cardíaca máxima o más reduce los niveles de glucosa, lo que disminuye el riesgo de contraer diabetes y algunas enfermedades cardiovasculares.
Refuerza tu mente.
No olvides el entrenar tu fuerza. Con sólo 20 minutos de ejercicios de resistencia hechos a alta intensidad pueden potenciar tu memoria a más del 10%.
Los investigadores responsabilizan de esto a la norepinefrina, hormona liberada durante el ejercicio, que juega un papel más que importante en los procesos de la memoria.
Diluye el estrés al ejercitarte.
En un estudio publicado en el diario Medicine & Science in Sports & Exercise, las personas que participaron en el mismo registraron niveles más bajos de ansiedad justo después de entrenar, y se mantuvieron así durante 30 minutos más.
“La actividad física potencia el flujo sanguíneo hacia partes del cerebro que te hacen conservar la calma”, dice el encargado de la investigación, J. Carson Smith.
Otro estudio publicado en el mismo diario, reveló que el efecto calmante del ejercicio puede estar ligado con la confianza que proporcionan los entrenamientos frecuentes.
Según Rodney K. Dishman, autor de este análisis, sentirte insatisfecha con tu apariencia genera ansiedad. Pero ponerte en forma puede mejorar también tu imagen y, como consecuencia, reducir el estrés.
Para cosechar esos beneficios, intenta hacer al menos 150 minutos de actividad física moderada por semana. Es bueno ejercitarte todos los días.
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