FRANCFORT, Alemania (AP) Volkswagen anunció el martes que su marca insignia cambiará a una nueva tecnología de emisiones diésel en Europa y Norteamérica, al tiempo que recorta su gasto anual en inversiones en 1.000 millones de euros (1.100 millones de dólares).
El director de la marca VW, Herbert Diess, hizo el anuncio mientras la compañía lucha por recuperarse de un escándalo por incorporar en sus autos un software que falseó las pruebas de emisiones en Estados Unidos.
Diess dijo que la empresa cambiará su tecnología diésel en Europa y América del Norte e instalará una que emplea una solución química de urea llamada AdBlue para reducir las emisiones de diésel. El proceso comenzará “lo antes posible”, explicó.
La empresa extenderá además sus técnicas de fabricación de bajo costo y reducirá el gasto en inversiones, apuntó.
La automotriz alemana también planea convertir la siguiente versión de su sedán de lujo Phaeton en un vehículo totalmente eléctrico para demostrar la capacidad tecnológica de la compañía.
Volkswagen AG, que tiene otras marcas que incluyen Audi y Skoda, enfrenta una crisis después de que reguladores estadounidenses dijeran que la empresa falseó las pruebas de emisiones en 482.000 vehículos. La empresa ya destinó 6.500 millones de euros (7.500 millones de dólares) para cubrir los gastos por llamados a reparación y multas, pero los analistas opinan que los gastos en multas y pérdidas serán considerablemente mayores.
VW reconoció el engaño a las autoridades estadounidenses el 3 de septiembre, más de un año después de que investigadores publicaran un estudio mostrando que las verdaderas emisiones de dos modelos VW eran mucho mayores a las permitidas.
Por su parte, Stephan Weil, gobernador del estado de Baja Sajonia que tiene una participación menor en Volkswagen dijo el martes a la legislatura local que “esta confesión hubiera sido mejor antes… otro error serio”.
Baja Sajonia tiene 20% de participación en Volkswagen y Weil ocupa un lugar en la junta directiva. Aseguró que los representantes del estado estaban “completamente sorprendidos” por el escándalo de emisiones y prometieron trabajar para proteger los empleos.