Chevrolet quiere eliminar el estrés y la molesta sensación que se siente al meter y sacar el embrague durante el tráfico. Para lograrlo el nuevo Impala incluye un nuevo sistema de control crucero adaptativo.
A diferencia del control regular de crucero, el sistema de control de crucero adaptativo de la gama completa Impala, utiliza futuro radar para permitir al conductor elegir una de las tres lagunas en la que a seguir el coche por delante. Estos espacios se adaptan a la velocidad de crucero seleccionada, por lo que se proporciona una mayor distancia entre los coches a una velocidad de crucero superior. El sistema es capaz de acelerar de forma automática y frenar el vehículo hasta niveles moderados para mantener la distancia del conductor seleccionado, e incluso puede funcionar en Stop&Go de las condiciones del tráfico, tales como cabinas de peaje automáticos.
A pesar de los avances del nuevo control crucero, el sistema exige la mayor concentración por parte del conductor. Pero sobre todo necesita que se haga el acelerado de manera manual.
Según estudios los frenos se usarán hasta 25% menos.