Trabajen duro, sean honestos y atiendan los problemas rápidamente para que no crezcan. Ese fue el mensaje que dio el sábado de la nueva directora ejecutiva de General Motors, Mary Barra, a los estudiantes de la Universidad de Michigan durante una ceremonia de graduación.
Barra, la primera mujer que dirige una compañía automotriz importante, tomó el cargo más alto de GM en enero, justo cuando estaban comenzando a surgir problemas letales en el interruptor de encendido de algunos de sus vehículos.
La compañía que comanda ha llamado a reparación en taller 2,6 millones de automóviles pequeños de modelos anteriores para arreglar los interruptores defectuosos, los cuales han sido vinculados a choques que han ocasionado al menos 13 muertes.
GM ha admitido que tuvo conocimiento del problema durante más de una década, pero comenzó a atenderlo hasta febrero. Barra testificó ante dos comisiones del Congreso que ella se enteró del asunto en diciembre.
El llamado a reparación no fue mencionado en el discurso preparado para la ceremonia, distribuido con antelación por GM. Sin embargo, hubo varias lecciones que parecían aplicar a sus primeros cuatro meses en la dirección del mayor fabricante de vehículos de la nación.
“Recuerden que la esperanza no es una estrategia”, dijo a los graduados. “Los problemas n o desaparecen cuando uno no los toma en cuenta, estos crecen más”.
Barra instó además a los recién egresados a ser honestos en cada aspecto de su vida y a utilizar su optimismo y propensión a la inclusión para repensar suposiciones caducas y exponer y corregir la injusticia. Les dijo también que mantengan cercana a la familia y amigos para celebrar los tiempos buenos y tener apoyo durante los momentos difíciles.
Dos grupos universitarios se opusieron a la decisión de la universidad de invitar a Barra para que les hablara. La Graduate Employees Organization (Organización de Empleados Graduados) aprobó una resolución solicitando a la escuela que cancelara la invitación debido al manejo de la compañía sobre el problema. Ésta fue apoyada por la Unión de Estudiantes de Michigan.
Aproximadamente 9.500 estudiantes en total recibieron títulos el sábado.