La aplicación de la tecnología eléctrica en un todoterreno es algo que Land Rover no podía dejar de hacer. El torque instantáneo de los impulsores eléctricos es una de sus mejores características al igual que la capacidad de no producir emisiones.
La marca presenta en el Salón de Ginebra a 7 prototipos del Defender con funcionamiento eléctrico. Este auto ya ha sido probado en terrenos exigentes donde, según la marca, el comportamiento es muy satisfactorio.
El equipo de Ingeniería Avanzada de Land Rover reemplazó el motor diésel y la caja de velocidades por un motor de 70Kw, el equivalente a 94 caballos de fuerza, alimentado por una batería de 410 kg ubicada en el techo.
Por ahora este prototipo del Defender eléctrico pesa 100 kg más que el modelo diésel y su autonomía a bajas velocidades por caminos accidentados alcanza los 80 km/h.