Reducir la dependencia al petróleo y las emisiones de contaminantes hacia la atmósfera, son los principales motivos por los que Honda y GM unirán esfuerzos para crear celdas de combustible de última generación.
A pesar que los autos que utilizan celdas de hidrógeno para reabastecerse tienen ventajas en tiempo y frecuencia en su recarga, los altos precios de las estaciones de abastecimiento han frenado abruptamente la evolución de estos automotores, ya que se calcula que cada una de ella tendría un costo superior al millón de dólares.
“Esta colaboración se basa en las fortalezas de Honda y GM como líderes en la tecnología de celdas de combustible de hidrógeno“, asegura Dan Akerson, Presidente del Consejo de Administración y Director Ejecutivo de GM. Y no se equivoca tomando en cuenta que las dos marcas tienen experiencia comprobable en este negocio.
GM lanzó en 2007 en Project Driveway, el cual colocó en las calles 119 automotores impulsados por higrógeno. Por su parte Honda por medio del alquiler de su FCX ha desplegado 85 unidades en Estados Unidos y Japón.
Con este acuerdo a largo plazo, los desarrolladores pretenden entregar resultados útiles antes del 2020 y de esa manera que los autos impulsados por hidrógeno despeguen de una vez por todas.