El equipo DS Virgin Racing, fundado recientemente para participar conjuntamente en la nueva especialidad de automovilismo FIA denominada Fórmula E, ha conseguido sus primeros puntos en el campeonato de la mano de su piloto británico Sam Bird, que cruzó la línea de meta en séptima posición sumando seis puntos, mientras que su compañero Jean-Éric Vergne terminó fuera de los puntos en 12º lugar.
Los vehículos que participan en la Fórmula E son monoplazas completamente eléctricos. Esta actividad supone una visión de futuro de la industria del automóvil en los próximos decenios y sirve de marco para la investigación y desarrollo de los vehículos eléctricos, el incremento de la popularidad de estos autos así como de la promoción de la conducción sostenible.
Bird, que lideraba la clasificación FanBoost (apoyo de los fans de redes sociales) y tenía 100kJ extra de energía en la segunda mitad de la carrera, comenzó bien alcanzado el sexto lugar desde la novena posición, antes de un contratiempo que le dejó undécimo. El piloto de 28 años reaccionó bien y realizó una serie de adelantamientos para remontar en la clasificación hasta la séptima plaza, asegurando que el equipo no se fuera de China con las manos vacías.
Tras la carrera, Bird ha comentado: Es bueno que hayamos conseguido nuestros primeros puntos, pero ha sido una carrera realmente frustrante. Ha habido signos alentadores, pero nos queda mucho trabajo por delante antes de Malasia.
Vergne, el otro piloto de DS Virgin Racing y ex-piloto de Fórmula 1, que marcó el segundo mejor tiempo en la calificación, tuvo dificultades en esta primera carrera. El francés, sin embargo, se animó con el ritmo mostrado por el coche durante el fin de semana y afirmó: Hemos conseguido un buen ritmo en calificación, pero ha sido una carrera muy difícil para mí personalmente. En conjunto, ha sido una experiencia de Fórmula E muy divertida aquí en Pekín y ahora debemos asegurarnos de que lo hacemos bien y volver a intentarlo dentro de dos semanas.
El equipo se dirige ahora a Putrajaya para el Premio de Malasia el 7 de noviembre, una carrera que trae buenos recuerdos al equipo por la victoria de Sam Bird allí la pasada temporada.
Los vehículos que participan en la Fórmula E son monoplazas completamente eléctricos. Esta actividad supone una visión de futuro de la industria del automóvil en los próximos decenios y sirve de marco para la investigación y desarrollo de los vehículos eléctricos, el incremento de la popularidad de estos autos así como de la promoción de la conducción sostenible.
Bird, que lideraba la clasificación FanBoost (apoyo de los fans de redes sociales) y tenía 100kJ extra de energía en la segunda mitad de la carrera, comenzó bien alcanzado el sexto lugar desde la novena posición, antes de un contratiempo que le dejó undécimo. El piloto de 28 años reaccionó bien y realizó una serie de adelantamientos para remontar en la clasificación, asegurando que el equipo no se fuera de China con las manos vacías.
Tras la carrera, Bird ha comentado que es bueno que hayamos conseguido nuestros primeros puntos, pero ha sido una carrera realmente frustrante. Ha habido signos alentadores, pero nos queda mucho trabajo por delante antes de Malasia.
Vergne, el otro piloto de DS Virgin Racing, que marcó el segundo mejor tiempo en la calificación, tuvo dificultades en esta primera carrera. El francés, sin embargo, se animó con el ritmo mostrado por el coche durante el fin de semana y afirmó: Hemos conseguido un buen ritmo en calificación, pero ha sido una carrera muy difícil para mí personalmente. En conjunto, ha sido una experiencia de Fórmula E muy divertida aquí en Pekín y ahora debemos asegurarnos de que lo hacemos bien y volver a intentarlo dentro de dos semanas.
El equipo se dirige ahora a Putrajaya para el Premio de Malasia el 7 de noviembre, una carrera que trae buenos recuerdos al equipo por la victoria de Sam Bird allí la pasada temporada.