Una vez se toma la decisión de comprar un carro, queda aún un dilema por resolver, el color. Es algo muy importante y donde se deben tomar en cuenta varias consideraciones.
Muchos factores se tienen que tomar en consideración, como las características asociadas a cada tono.
Por lo general existen valores o características relacionadas, de forma incosciente, a cada color. Por ejemplo, el color blanco se equiparía con alegría, mientras que los colos colores o tonos obscuros, se suelen ver como un símbolo de estatus de poder.
Todo lo contrario, azules o rojos, transmiten un elevado grado de energía y dinamismo, siendo estos colores los preferidos por jóvenes.
Tonos grisaseos se relacionan a elegancia y distintición, así como modernidad.
Lo más importate en la elección del color para un vehículo sea la seguridad que este brinde. Según un estudio revelado por la Universidad de Auckland, los autos de color marrón, negro y verde, presentan una mayor predisposición a sufrir accidentes.
Contrario a esto, los coches de color gris brillante, tienen una menor posibilidad de sufrir percances.
Otro de los factores importante a la hora de escoger el color para un coche es la originalidad. A mucha gente no le gusta comprar un carro y posteriormente descubrir que hay cientos de coches exactamente del mismo color.
Finalmente, y no menos importante, también se debe considerar el día a día y el uso que se le vaya a dar al coche. Un ejemplo de esto es son los de color gris y obscuros que tienen la ventaja de disimular las manchas o daños que sufren, mientras tanto los blancos son mucho más visibles. Los coches de tonos claros reflejan más los rayos solares, por lo que pasear durante el verano será fresco en el interior.