5 mitos que debes dejar de creer sobre estudiar una maestría
Hacer estudios de posgrado puede ser el deseo de muchos cuando se concluye una licenciatura o incluso cuando ya se está inmerso en el mundo laboral. Sin embargo, también existe una serie de creencias relacionadas con la falta de tiempo o recursos que nos llenan de inseguridades y pueden hacernos frenar en la realización de nuestros sueños.
Por fortuna, el mundo digital ofrece diversas ventajas como una mayor oferta de maestrías en línea, mediante esquemas flexibles que se ajustan mejor a los horarios de personas que ya trabajan, mediante maestrías ejecutivas, creadas especialmente para este perfil de estudiantes. Además de la posibilidad de obtener becas para facilitar la carga monetaria que también podría ser un obstáculo.
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Regresando a las falsas ideas que pueden frenar nuestros deseos de desarrollo profesional, enlistamos los cinco mitos más comunes sobre estudiar una maestría que debes dejar de creer, para decidirte de una vez a dar el paso e inscribirte para estudiar un posgrado, especializarte, ganar competitividad laboral, obtener mejores salarios e impulsar tu desarrollo profesional:
Mito #1 Estudiar una maestría es difícil y caro
Suele creerse que realizar estudios de posgrado es difícil y que requiere disponibilidad de tiempo. Sin embargo, lo cierto es que la educación en línea, mediante sistemas asíncronos, representan la alternativa ideal para que puedas continuar tus estudios, gracias a que puedes organizar tus tiempos de estudio en función de tus actividades laborales o familiares.
Por otro lado, existen universidades en línea que cuentan con programas de beca para apoyar a los estudiantes en sus gastos de estudio. Sin considerar que estudiar en plataformas digitales también conlleva un ahorro en gastos de transportación y materiales, que suelen estar implicados en sistemas educativos tradicionales o presenciales.
Mito # 2 Las maestrías no son valoradas en México
Una idea errónea sobre las maestrías es que de nada sirve estudiarlas, ya que no son valoradas en el mundo laboral. Sin embargo, lo cierto es que el ingreso promedio de una persona con maestría es por lo menos 64.9% superior al que se obtiene con estudios de licenciatura, de acuerdo con un estudio del Instituto Mexicano de la Competitividad (Imco) y la Encuesta nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
Existen algunos puestos gerenciales o de mayor responsabilidad en las empresas donde el título de maestría forma parte del perfil que se busca para cubrirlo y sobra decir que son este tipo de cargos los que representan salarios mayores.
Mito # 3 Las maestrías en línea no son confiables
Las ventajas que las herramientas digitales demostraron durante la pandemia, para hacer la educación accesible ante barreras del tiempo y el espacio, nos han permitido observar que las opciones de educación en línea también son una excelente manera de adquirir formación y aprendizaje.
Sin embargo, a la hora de elegir la institución educativa donde cursarás tus estudios, es importante revisar que los programas educativos que ofrece cuentan con Validez Oficial ante la Secretaría de Educación Pública (SEP) para garantizar que el título que recibirás al concluir tus estudios será emitido por las autoridades educativas del país.
Mito # 4 Necesitas pasar exámenes muy difíciles para ser aceptado
Si bien la oferta educativa pública tiene una demanda bastante alta y, por lo mismo, procesos de selección mucho más estrictos, esto no debe ser un impedimento para tener acceso a educación de calidad que aporte mayor competitividad laboral a quienes están interesados en complementar su formación académica.
La oferta de instituciones privadas es cada vez más amplia, mediante programas flexibles, con requisitos únicamente relacionados con la acreditación de estudios de nivel superior, licenciatura o ingeniería, que te permitan obtener el grado académico de maestría una vez cursada la especialización correspondiente y mediante inscripción totalmente en línea.
Mito # 5 Los estudios de maestría no tienen aplicación en el mundo real
Finalmente, otra de las ideas que están relacionadas con las maestrías es que están enfocadas únicamente a la investigación y que se estudian solamente para obtener un grado académico, pero que los conocimientos adquiridos no tienen aplicaciones prácticas en el ámbito laboral o empresarial.
En realidad, los estudios de maestría están enfocados no solo en ampliar los conocimientos, sino en elevar el nivel de especialización de los alumnos en áreas específicas del mercado laboral. Sin considerar que en el caso de las maestrías ejecutivas, están diseñadas para responder a las competencias que exige la sociedad actual en torno a buscar soluciones a los retos de la vida contemporánea en cualquier industria o sector.
Conclusión
Como has podido ver, muchas de las ideas que podrías tener sobre las maestrías son totalmente erróneas. Saber esto te hace estar más cerca de tomar la decisión de continuar tu desarrollo profesional. Solo es cuestión de buscar aquellas instituciones que tengan una oferta educativa amplia, donde seguro encuentras ese posgrado con validez oficial que catapultará tu desarrollo profesional.
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