La correa de distribución o dentada es la encargada de sincronizar el movimiento ascendente de los pistones y descendente de las válvulas, así que irónicamente aunque su nombre lo indique, esta no distribuye nada.
A pesar que los motores modernos trabajan con el sistema de interferencia de estas dos partes, debe existir cierto ritmo entre cada una de ellas para evitar que existan daños o fallas en el funcionamiento del motor.
El automóvil no puede prevenir un fallo en este sistema, por lo que es recomendable hacer cambios preventivos y así evitar daños repentinos en sus piezas (Árbol de levas, rodillo tensor, bomba de inyección y cigüeñal). Se recomienda hacer el cambio de la pieza cada 90 mil km, y al hacer el cambio de esta es mejor hacerlo también con el rodamiento tensor y la bomba de agua que es arrastrada por esta.
El cambiar esta pieza es muy complicado y requiere de cierto grado de experiencia, así que si te animas te damos unos tips para hacerlo:
- Retira el cable negativo de la batería.
- Quita la tapa del distribuidor.
- Gira el tornillo del cigüeñal hasta que la marca del tiempo en su polea, esté alineada con la de 0 °.
- Verificar que el rotor del distribuidor esté alineado con la marca índice en las mangueras del distribuidor indicando que el rotor está en posición de arrancar el cilindro número uno..
- Remueve los componentes o accesorios de la correa de transmisión que no dejen retirar la cubierta.
- Retirar los tornillos que detienen la cubierta de la correa y sacar del motor.
- Por último revisar la alineación correcta de la manivela y marcas del árbol de levas.