AUSTIN, Texas, EE.UU. (AP) El futuro del Gran Premio de Estados Unidos quedó en duda el miércoles al aparecer como “pendiente de acuerdo” con el promotor en el calendario para 2016 publicado por la Fórmula Uno.
Los encargados del Circuito de las Américas en Austin, Texas, han dicho que tienen problemas económicos después que la edición de 2015 se vio afectada por tormentas que obligaron a cancelar buena parte de las actividades previas a la carrera. Además, la oficina del gobernador de Texas anunció que reducirá el financiamiento público por alrededor de 20%.
El calendario de 2016 todavía incluye a la carrera, programada para el 23 de octubre, pero con un asterisco. Los administradores de la pista no respondieron de inmediato para comentar al respecto.
A un costo de 300 millones de dólares, la pista fue construida para albergar la carrera, que se realiza en Austin desde 2012. El piloto de Mercedes Lewis Hamilton la ganó tres veces, incluyendo este año cuando aseguró allí su tercer campeonato mundial de la F1.
Los inversionistas privados que construyeron el circuito, entre ellos los empresarios Bobby Epstein y Red McCombs, aseguran que se les prometió recibir una ayuda significativa del estado para cubrir el costo de los derechos comerciales al montar la carrera como parte de un contrato de 10 años.
Bajo un acuerdo alcanzado por el exgobernador Rick Perry y la excontralora Susan Combs, Texas aportó 25 millones de dólares en el primero año. El dinero se sacó de un fondo para eventos del estado
Los promotores contaban con ese dinero cada año. Pero una carta que Perry y Combs enviaron en 2010 a Bernie Ecclestone, el dueño de los derechos comerciales de la Fórmula Uno, resaltó que el aporte correspondiente al estado podría ser menor a los 25 millones de dólares por el resto del contrato. La carta señala que si los ingresos por impuestos se quedan cortos, los promotores deberán asumir la diferencia.
El despacho del actual gobernador, Greg Abbott, informó a los encargados del circuito que recibirán 19,5 millones de dólares para la próxima carrera debido a que la fórmula que se usaba para asignar los montos había sido ajustada de modo que fuera más estricta.
Al añadirle el dinero recaudado por impuestos, los organizadores de la carrera deben recibir 23 millones de dólares provenientes de fondos públicos.
El despacho de Abbott no respondió de inmediato a consultas sobre el nuevo calendario. Abott se encontraba de viaje en Cuba, cumpliendo el miércoles el tercer día de una misión comercial en la isla.
El alcalde de de Austin, Steve Adler, ha dicho que la carrera es un evento importante para la capital del estado de Texas. Pero también advirtió a los encargados del circuito que no deben esperar un “rescate” por parte de la ciudad.