En opinión del presidente de la Asociación Mexicana de Internet (Amipci), Carlos Ponce, si bien el país registra avances importantes en materia de políticas públicas encaminadas a garantizar el acceso a esta tecnología, hay elementos como el precio, la velocidad, la calidad y la cultura digital que deben mejorarse.
Hay fuentes como la OCDE que dicen que pagamos por conectarnos más de lo que se pagaría en otro país; creo que el costo que se tuvo por conectar a México y que permitió que existiera más fibra óptica, acceso a PCs ya se pagó, hoy necesitamos aplicar la ley de la oferta y la demanda, señaló el directivo a Notimex.
Para ello, abundó, es fundamental contar con la ley secundaria que instrumentará la reforma en materia de telecomunicaciones y radiodifusión, donde uno de sus objetivos clave es garantizar el acceso equitativo a Internet.
Sin embargo, no basta con aumentar el número de accesos a la red, sino que es necesario que la conectividad se encuentre en los estándares internacionales de velocidad y calidad para que los usuarios puedan aprovechar al máximo sus beneficios.
Con una buena política y un buen marco legal se puede salir de los bajos índices de conectividad, aumentar el número de personas y negocios usando Internet y que crezca el comercio electrónico; esto se tiene que dar de manera equitativa, pero también que el servicio sea de calidad, insistió.
En 2012, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) señaló que los servicios de banda ancha en México son caros y las velocidades ofrecidas muy lentas en comparación con el promedio de los países que conforman el organismo internacional.
Según su estudio, los precios de una suscripción mensual promedio para velocidades que oscilan entre 2.5 y 15 Megabits por Segundo (Mbps), con y sin cargos por línea, presentan un costo superior a los 90 dólares, es decir, 156 por ciento más caro que Luxemburgo, el segundo país más caro de la OCDE.
Para el presidente de la Amipci, el gobierno federal, la industria y la academia realizan esfuerzos importantes para crear un entorno digital óptimo que permita a México subir escalones en el ranking mundial en términos de conectividad.
La estrategia digital y la reforma en telecomunicaciones plantean garantizar el acceso sin restricción a las herramientas tecnológicas a una sociedad cada vez más interesada en aprovechar Internet y más demandante del entorno digital, no sólo en el aspecto de entretenimiento, sino de educación, salud, gobierno y servicios.
Asimismo, dijo, la iniciativa privada tiene claro que Internet es una plataforma para el desarrollo económico mediante prácticas como el comercio electrónico, la mercadotecnia, la innovación y el desarrollo tecnológico.
Todos ya estamos entendiendo que podemos reducir el costo de la vida familiar, los negocios, la educación y el entretenimiento con el uso de Internet, sabemos ya que la productividad y los márgenes de utilidad crecen gracias a las Tecnologías de la Información, señaló.
Como cada año, la Amipci presentará en el marco del Día del Internet, que se celebra el 17 de mayo, el estudio de hábitos y percepciones de los cibernautas en México, el cual en 2013 reveló que entre los 45.1 millones de usuarios el tiempo promedio de conexión fue de cinco horas.