Durante un encuentro con la prensa internacional en El Vaticano, Slawomir Oder, el postulador de la causa de canonización de Karol Wojtyla, aseguró que fueron analizados todos los documentos y estos exoneraron al pontífice.
Sin entrar en detalles puedo decir que la investigación se realizó con el deseo de aclarar todo y afrontar cada uno de los problemas que se iban presentando, indicó. (Sobre Maciel) se hizo una investigación, se estudiaron los documentos a disposición y la respuesta fue muy concreta: no existe algún signo de involucramiento personal del santo padre en este caso, agregó.
El caso de Marcial Maciel Degollado ha sido el centro de atención de diversos grupos contrarios al reconocimiento como santo de Juan Pablo II, quien alentó y promovió la obra de los Legionarios de Cristo durante su pontificado. Mientras eso ocurría varios exseminaristas de la congregación denunciaron públicamente al fundador por abusos sexuales, cometidos cuando ellos eran menores de edad.
Una investigación eclesiástica, concluida durante el pontificado de Benedicto XVI, estableció que Maciel fue culpable no sólo de abusos, sino también de otros actos inmorales. Pero el caso de los Legionarios no fue la única voz contraria al reconocimiento de la santidad de Karol Wojtyla que fue tomada en cuenta durante el proceso.
Según explicó Oder, al inicio de la causa se publicó un edicto en el cual se invitó a todas las personas que tuviesen material o conocimiento de los hechos, a dar su propia contribución.
En el curso del proceso recibimos algunas voces contrarias, desde la izquierda de la Iglesia, la teología de la liberación, que criticaba algunas presuntas actitudes conservadoras del Papa, algunas opciones teológicas, precisó el sacerdote polaco. Desde la otra parte, tuvimos observaciones críticas de parte de los ambientes más cercanos a monseñor Lefebvre, desde donde se recriminaba al Papa demasiada apertura y liberal, añadió.
También lamentó que algunos días atrás se publicasen, en un diario italiano, las declaraciones del cardenal Carlo Maria Martini, exarzobispo de Milán, las cuales fueron interpretadas en una clave de oposición al reconocimiento como santo de Wojtyla.
Es una clave de lectura injusta y no verdadera. Yo pienso que estas palabras se deben interpretar en una discusión mucho más amplia. No debemos olvidar que justamente el cardenal Martini calificó a Juan Pablo II el padre espiritual de la humanidad, apuntó.