Familiares de Warren Hill, un preso ejecutado por el estado de Georgia (EE.UU.) el martes último, solicitaron donaciones a través de un sitio web para costear los gastos del funeral y el traslado del cuerpo.
Sharita Satterwhite, encargada de las donaciones y sobrina del ejecutado, aseguró que los padres del preso son muy ancianos y no tienen el capital para permitirse un entierro digno.
Warren Hill, un hombre afroamericano de 55 años, ingresó a la cárcel en 1986 para cumplir su condena de cadena perpetua, luego de asesinar a su novia de once balazos. Cuatro años más tarde, el hombre apuñalaría a un compañero de celda, lo cual le costaría un año más de la pena capital.
Hill nació en 1960, en el seno de una familia pobre, donde su padre era alcohólico y abusaba de su madre, quien descargaba su ira en el chico.
Aunque los abogados de Hill recurrieron la ejecución ante la Corte Suprema de Justicia, sus familiares, poco confiados en un desenlace feliz, abrieron una página a finales de la semana pasada para recaudar fondos para el entierro.
El objetivo es recaudar fondos para trasladar el cuerpo de Hill desde el penal de Jackson (Georgia), hasta Anderson (Carolina del Sur) donde actualmente residen sus familiares y le podrán organizar un sepelio.
Hasta el momento, los familiares han recibido 72 donaciones de entre 5 y 100 dólares, para un total de 2,200 dólares, aunque la cifra sigue en aumento.
Quienes realizaron su aporte aprovecharon para solidarizarse con la familia y escribir mensajes de aliento.
“Frente al racismo abrumador y la discriminación de nuestro (in)justo sistema penal, esto es el mínimo que puedo hacer. Mi apoyo y solidaridad”, afirmó Lydia Brown, tras aportar 25 dólares.
Por su parte, Satterwhite agradeció el apoyo y las donaciones, al tiempo que reconoció que su tío “estaba y estará en paz” ya que “pidió perdón a Dios hace muchos años, y esos es lo que importa”.