El miércoles Lelia Pérez presentó una querella contra un grupo de militares a los cuales acusa por violarla cuando era estudiante y tenía 16 años.
Según Pérez, la violación se dio al producirse el golpe de estado de 1973.
La querella fue presentada por el abogado Hiram Villagra ante los tribunales y es una más de las presentadas como caso de “violencia política sexual“, en los cuales se acusa a militares por someter a mujeres a violaciones en masa, como introducciones de ratas en la vagina y mantener relaciones sexuales con familiares.
Según Pérez, el día que se produjo el golpe de estado contra Salvador Allende, en 1973, ella junto a otras mujeres que se dirigían a un inmueble cercano a la Universidad Técnica del Estado fueron apresadas por una patrulla militar, posteriormente fueron conducidas al Estadio Chile, el cual era un centro de reclusión y fueron violadas por militares.
“No sé cuánto duró ni cuántos fueron”, explicó. Dijo que la quemaban con electricidad en los muslos “para obligarme a abrir las piernas para violarme”.
Pérez identificó a uno de los violadores, Edwin Dimter Bianch, aún cuando le cubrían la cabeza con una toalla. La querella está dirigida a Dimter y a otros siete militares, mismos que son acusados por el asesinato en el Estadio Chile del folclorista Víctor Jara.
Quienes han realizado tales acusaciones buscan que los crímenes sean catalogados como de lesa humanidad y que se cambie el Código Penal de 1874, el cual no considera la tortura como un delito.
En las próximas semanas se espera que otras mujeres realicen las denuncia por violencia política sexual.