El jefe, ex jefe y cuatro agentes del Departamento de Policía de King City fueron arrestados el pasado martes tras ser acusados de corrupción y conspiración para vender los autos que decomisaban a inmigrantes indocumentados.
En el esquema delictivo los agentes tenían relación con el dueño de una compañía de gruas, familiar de uno de los policías, para la venta de los autos que no eran reclamados por las víctimas.
King City es una pequeña comunidad rural en el área del valle de Salinas en el norte de California.
Esta es una comunidad de más de 13 mil residentes con 80 por ciento de estos de origen latino. Su departamento de policía esta integrado por 17 oficiales.
En la denuncia criminal se indicó que a los agentes de la policía se les permitía mantener un auto decomisado para su uso personal después de decomisar de 10 a 15 autos.
La mayoría de los autos que eran decomisados eran a inmigrantes indocumentados de origen latino y quienes tenían problemas de comunicación por no saber inglés.
A un sargento de la policía por el cúmulo de decomiso se le acusó de haberse quedado con vehículos como un Pontiac LeMans, una Ford Expedition y una Ford Explorer.
Los arrestos se dieron después de una investigación de seis meses en la que intervinieron varias agencias policíacas encabezadas por la procuraduría de distrito del condado de Monterrey y la Agencia Federal de Investigaciones (FBI).
El procurador de distrito del condado de Monterrey, Dean Flippo, señaló que estos agentes cometieron corrupción, soborno y otros actos criminales.
En California ante la obligación de conducir con una licencia valida, se cree que más de dos millones de indocumentados manejan a salto de mata y enfrentan el riesgo del decomiso de sus autos.
Flippo explicó que los arrestados fueron el jefe del departamento de policía, Bruce Miller, y su hermano Brian Miller, dueño de grúas Miller Tow.
Asimismo, el sargento Bobby Javier Carrillo, el ex jefe de la policía, Dominic “Nick” Baldiviez, quien se retiró en septiembre, y el oficial Mario Alonso Mottu.
En el reporte se indicó que Carrillo envío el 87 por ciento de vehículos decomisados de marzo de 2010 a noviembre de 2013 por grúas Miller Tow, aunque la ciudad tiene acuerdo con cuatro compañías de grúas.
En la queja se indicó que Bruce Miller recibió el soborno de un vehículo decomisado por Carillo.
Flippo explicó que sólo Carrillo decomisó más de 200 vehículos del 1 de marzo de 2010 al 1 de noviembre de 2013.
En las disposiciones por conducir sin licencia válida, las autoridades obligaban a que el vehículo se mantuviera por 30 días y para recuperarlos tenían que pagar entre dos mil a tres mil dólares.